—El presidente electo Joseph R. Biden está a punto de entrar directamente en una espiral en el Congreso después de decir durante la campaña que los republicanos tendrían una “epifanía” una vez que el presidente Trump fuera derrocado, una postura que muchos de la izquierda descartaron como irremediablemente ingenua.
El senador Lindsey Graham de Carolina del Sur dijo el miércoles que no se puede esperar que los republicanos crucen el pasillo si Biden y su equipo adoptan posiciones de extrema izquierda en asuntos como la inmigración.
“Si quiere deshacer la seguridad fronteriza, vamos a pelear”, dijo Graham . “La pregunta para mí es, ¿a quién le responderá? ¿Va a responder a los elementos más radicales del Partido Demócrata o responderá a voces más moderadas en su partido? ”
Como vicepresidente, Biden se desempeñó como una especie de susurrador de Mitch McConnell para el ex presidente Barack Obama, al cerrar tratos con el líder de la mayoría del Senado sobre importantes proyectos de ley de impuestos y gastos.
Los dos hablaron esta semana, y Biden dijo que ha escuchado a un puñado de senadores republicanos que dicen que están listos para trabajar juntos en infraestructura y política exterior.
“Puedo comerme estas palabras, pero les predigo que a medida que la sombra de Donald Trump se desvanezca, verán un gran cambio”, dijo.
Durante las primarias presidenciales, los activistas liberales rechazaron tales llamados y predicciones. Dijeron que los demócratas necesitaban un luchador sin cuartel para confrontar y destripar al Partido Republicano después de cuatro años de Trump .
Jen O’Malley Dillon, directora de campaña de Biden y jefa de gabinete adjunta entrante de la Casa Blanca, dijo que la presidenta electa demostró que los detractores estaban equivocados cuando atacó profanamente al Partido Republicano.
“En las primarias, la gente se burlaba de él, como, ‘¿Crees que puedes trabajar con republicanos?’”, Dijo O’Malley Dillon en una entrevista con la revista Glamour que se publicó esta semana.
“No estoy diciendo que no sean un montón de padres”, continuó. “Mitch McConnell es terrible. ¿Pero esta sensación de que no puedes desear eso, no puedes desear este ideal bipartidista? Él rechazó eso “.
McConnell felicitó a Biden como presidente electo esta semana y advirtió a sus tropas que no se unan a una apuesta arriesgada de los conservadores de la Cámara para desafiar los resultados del Colegio Electoral cuando se anuncien en el Congreso el próximo mes.
Pero el republicano de Kentucky hizo una pregunta sobre el momento en que el Senado podría votar sobre las elecciones del gabinete de Biden .
“Nuestro primer trabajo aquí es tratar de terminar esta sesión con esta administración y tendremos mucho tiempo para hablar sobre el camino a seguir”, dijo McConnell. “El futuro se cuidará solo”.
Si los demócratas no barren en las dos elecciones de segunda vuelta del Senado en la tradicional Georgia roja el mes próximo, Biden sería el primer presidente desde George HW Bush en comenzar su primer mandato con un gobierno dividido.
Incluso si los demócratas ganan las dos elecciones de Georgia, Biden no tendría mucho espacio para moverse. Tendría un control mínimo en el Senado y una mayoría disminuida en la Cámara.
“El mejor escenario para los demócratas es un Senado 51-50 con los votos de Joe Manchin y los votos de Kyrsten Sinema que se necesitan para todo”, dijo Ramesh Ponnuru, miembro visitante del American Enterprise Institute.
Manchin de West Virginia y Sinema de Arizona son voces comparativamente moderadas que es poco probable que escriban un cheque en blanco en el extremo izquierdo.
La vicepresidenta electa, la senadora Kamala D. Harris sería el voto decisivo en un Senado 50-50, dando a los demócratas una mayoría efectiva.
“Creo que va a estar extraordinariamente encerrado”, dijo Ponnuru. “En cierto modo, probablemente empeore si tiene el control nominal del Senado en el sentido de que hay más expectativas de acción y logros por parte de sus partidarios”.
El Sr. Biden ha prometido en repetidas ocasiones a ser un presidente no sólo para sus seguidores, pero para los 74 millones o más personas que votaron por el Sr. Trump también.
“Su voz debe formar parte de la agenda de Biden ”, dijo Jim Townsend, subsecretario adjunto de Defensa durante la administración Obama. ” Biden tendrá que demostrar que realmente lo dice en serio”.
Townsend, ahora miembro adjunto del Centro para una Nueva Seguridad Estadounidense, reconoció la profunda división y el hiperpartidismo que complican los problemas internos.
“Por el lado de la política exterior y de defensa, no está tan dividido”, dijo. “Es más una cuestión de convencer a los trumpianos de que cualquier cosa que hagamos en el lado militar o en el lado de la política exterior, siempre es Estados Unidos primero porque eso es lo que haces”.
El Sr. Graham señaló que llegar a un acuerdo podría ser más fácil decirlo que hacerlo cuando se trata de China, llamando al Partido Comunista de China el “imperio del mal del siglo 21”.
“Creo que Donald Trump ha sido como Reagan en China”, dijo. “Y me temo que Biden va a ser una especie de Chamberlain para Hitler cuando se trata de China”.
